Diría que estoy hecha de emociones. Y es por ello, que todas mis fotografías tienen esa mirada especial que busca la emoción, la mirada, esa fotografía que nos evoca sensaciones únicas.
Quiero ofrecerte fotografías que se conviertan en un pequeño tesoro. Cuidadas, mimadas, con una luz especial y que vas a conservar toda la vida.
Los niños crecen muy rápido. Demasiado.
A veces, los padres me mandan un mensaje después de años para decirme que solo me escriben para contarme que han vuelto a abrir la caja de las fotografías, el álbum…después de un tiempo y han vuelto a emocionarse, me escriben para darme las gracias otra vez por devolverles, a través de esas fotografías, la expresión infantil que les enamoraba, sus rasgos, su mirada.
Cuando llegue el momento de realizar el reportaje, os mandaré unos consejos para preparar la sesión.
En las sesiones infantiles, podemos realizar fotografías con los papis. Será siempre un recuerdo precioso para ellos y está incluido en el pack de la sesión infantil.
Porque es la única forma que tenemos de atrapar ese momento tan maravilloso de sus vidas, que es tan fugaz, y retenerlo. No solo para vosotros, también para ellos. Con el tiempo, verán su infancia a través de sus fotografías.
La infancia es descubrir, risa, expresión. En pocos años, aprenden a gatear, caminar, a relacionarse y a ser pequeñas personitas, y durante ese proceso, son divertidos, pícaros y espontáneos. Son ellos mismos y son pura esencia. Es maravilloso contar su historia en cada etapa de su infancia.
Todas. Cada etapa tiene su magia. Con un añito son maravillosos, con dos o tres, son tremendamente graciosos, y conforme van creciendo, ya nos hacen un poquito de caso para hacer fotografías más cuidadas y poéticas.
Difícil decisión.
Son conceptos diferentes, pero ambos son especiales.
Las sesiones de estudio son más pictóricas, más artísticas. Me encanta jugar con la luz y crear imágenes llenas de magia.
El clima es importante en las fotografías de exterior. Por eso es mejor hacerlas entre mayo y septiembre, sin olvidarnos del otoño, que nos regala fotografías maravillosas con unos colores increíbles.
Si son movidos, es probable que se sientan mejor en exterior. Pero también es cierto que en el estudio los tenemos un poquito más controlados.
el acordeón
Hablaremos antes de la sesión de que ropa llevar según como vayamos a orientar la sesión. Os mandaré algunas recomendaciones para que podáis prepararlo.
Dura aproximadamente 1 hora, a veces algo más si los niños necesitan más tiempo. No suelen ser muy largas porque a estas edades se cansan en seguida.
Por supuesto. Las fotografías de familia son momentos para sentir, para quererse, para jugar con vuestros hijos, y mi papel es captarlo para vosotros.
Para hacer la reserva basta con elegir juntos el día y dejar una señal para hacer la reserva.